A solo 14 km al sureste de Cracovia se encuentra la mina de sal de Wieliczka (vyeh-leech-kah), una de las principales atracciones de Polonia. Con sus 300 km de túneles y cámaras repartidos en nueve niveles, con el más profundo a 327 m bajo tierra, los turistas han quedado cautivados desde 1722. Las visitas guiadas de dos horas brindan a los visitantes la oportunidad de explorar una parte de la mina. Mientras que la ruta 'turística' estándar permite a los recién llegados descubrir las principales atracciones, aquellos que han estado antes pueden optar por una ruta 'minera' más inmersiva.